sábado, 1 de septiembre de 2012

Cuestión del destino

Después de ver la película conocida como La Curiosa Historia De Benjamin Button, he comenzado a pensar en varias cosas, una de ellas es en el destino, a este se le conoce como el camino de principio a fin de la vida, sin poder evitarse de ninguna forma. Esto hace que todas nuestras opciones se vean reducidas en un solo camino, y, al final de este, nos espera la muerte.

El destino hace que todo lo que nos ocurra se produzca como algo necesario e inevitable, siendo creados con una misión que tenemos desde nacimiento. Esta será cumplida sin nada que lo interponga. El destino no es siempre un camino heroico ni lleno de flores, ya que este puede ser desde morir joven, a ser el próximo ídolo musical.

En esta creencia todo depende de la "suerte" que tengamos, esta palabra está resaltada entre comillas por el hecho de que los creyentes rechazan los fenómenos conocidos como el nombrado anteriormente, y la casualidad. Debido a que el destino es un concepto infalible, indica que, si tiramos un dado, y el resultado es, por ejemplo, un cinco, ese número no podría haber sido otro que el resultante.

Algunos que piensan que el destino existe, dice que puede ser modificado, pero solo en ciertas partes de esta, cuando, personalmente, nos dan a elegir, ya que cada persona tiene una forma de ser única, dando como resultado un destino cambiante en diversos aspectos. 

Pero mi explicación se interpreta de otra forma, bastante difícil de entender, por lo que intentaré expresarme de la forma mas clara y precisa posible:

En mi explicación, no se puede cambiar ni modificar de ninguna forma como lo indica en la primera definición de la entrada. El hecho de no poderse moldear es por que todo lo que ocurre está producido por el mismo destino.

Lo que quiero decir con esto es que, lo que conocemos como esta creencia, es una acumulación de acontecimientos que ocurren continuamente, teniendo todo un detonante, que ya puede ser por nuestra manera de ser, por nuestro estado de ánimo en el momento o por las circunstancias que se nos interponen.

Esto hace que tengamos que pasar por cosa u otra que realmente elegimos, pero como el mismo destino nos creó de esa manera, también sabe lo que se va a elegir, como si fuéramos estudiados. Como resultado, todos tenemos un principio y un fin, que está destinado, y cualquiera de nuestras elecciones no modificarán este, al contrario, continuará su camino, pues al ser como se dicta nuestro futuro, el agua seguirá su cauce hasta su final.

Con un ejemplo quizás mas aclaratorio se podría entender mejor lo que quiero dar a conocer:


-Torse 

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